Cuando l@s hij@s emprenden... el vuelo

Cuando l@s hij@s emprenden... el vuelo 

 

Sabemos que llega un momento en el que nuestr@s hij@s deciden empezar a volar por su cuenta. Lo entendemos, es parte de crecer, de madurar y buscar su independencia. Pero, la verdad, ¡cómo duele! Es un sentimiento raro, porque te llena de orgullo, pero también deja un huequito en el corazón.  

Desde el primer día que l@s dejamos en la escuela hasta cuando deciden mudarse, viajar o empezar su propia familia, cada paso es una mezcla de “lo estoy haciendo bien” y “¿por qué se siente tan vacío?”. Pero hay algo importante que nunca debemos olvidar: el éxito comienza desde el primer paso. Cada decisión, por pequeña que sea, es parte del camino hacia sus logros, y nosotros estamos ahí para acompañarlos desde lejos.  

El orgullo que da verlos crecer: Aunque a veces cuesta admitirlo, verlos tomar decisiones (aunque a veces no sean las mejores) es una señal de que están listos para enfrentar la vida. Y eso es todo un logro.  

El dolor es normal: No pasa nada si de pronto sientes nostalgia. Extrañarl@s es normal; al final, han sido una parte enorme de tu vida. Lo importante es recordar que su independencia es un resultado de tu esfuerzo y amor.  

Déjal@s que tropiecen: Aunque nos duela verlos equivocarse, esos tropezones son parte de aprender. Y siempre van a contar contigo para levantarse.  

Aprovecha tu tiempo: Ahora que tienen sus propias aventuras, es el momento perfecto para que tú busques las tuyas. Retoma hobbies, planea esos viajes o simplemente dedícate tiempo a ti.  

Sé su red de apoyo: Un “¿cómo estás?” o un mensajito rápido es suficiente para recordarles que estás ahí, sin necesidad de invadir su espacio.  

Criamos a nuestros hijos para que un día vivan su propia historia. Y aunque duela, ese dolor nos recuerda lo mucho que los amamos. Al final del día, su éxito, desde el primer paso hasta el más grande, siempre llevará un pedacito de nosotras.